El sector salud suele ser uno de los rubros más explotados a
nivel económico, por lo tanto uno de los
gastos que representan un duro golpe a la economía familiar, es por ello que en
1997, la Secretaría de Salud, implementó la liberación de medicamentos genéricos
con el fin de volver accesibles fármacos a las personas que lo necesitaran,
pues la reducción de costos era de alrededor del 87%. Sin embargo, la medida no
llegó sin protestas, principalmente por parte de las empresas farmacéuticas,
que acusaban de ser una práctica desleal - mismas que se ampararon para que no
se permitiera la producción y comercialización en nuestro territorio.
México es el país, hoy en día, con mayor penetración de estos
medicamentos; en 2010 representaba el 54% del volumen del mercado y en 2013 se
convirtió en el 84%, y de acuerdo a los cálculos en 2020 se podría convertir en
90%.
Esto se debe a tres factores:
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El vencimiento de patentes abrió la posibilidad
a cualquier farmacéutica para utilizar la formula del medicamento.
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Al ser
una mejor opción desde el punto de vista económico, la gente comenzó a
normalizar su uso.
-
La Comisión Federal Para la Protección contra
Riesgos Sanitarios (Cofepris) trabajo mucho en materia regulatoria, de tal
manera que la calidad de estos medicamentos aseguraban un estándar.
Existen en la actualidad más de 500 registros para los
medicamentos genéricos en la República Mexicana, y, según cifras de la
Secretaría de Salud, el hecho de que se normalice el uso de medicamentos
genéricos ha ahorrado a la sociedad aproximadamente 24 millones de pesos.
“Las circunstancias en que arrancamos 2017 harán que la
población demande una mayor cantidad de genéricos, lo
que tendrá un efecto acelerador en el sector en los próximos
dos años”, declara José Ignacio
Campillo García, presidente ejecutivo de la Funsalud (Fundación
Mexicana para la Salud).
Es cierto que está industria - de empresas nacionales - logra
abastecer el mercado pero con las manos llenas, sin embargo, varias compañías
buscan expandirse e internacionalizarse, lo que significaría una mayor
seguridad frente a devaluaciones.
Luis Felipe Espinosa de los Monteros, el director de
Laboratorios Collins - una empresa dedicada a la producción de genéricos -,
comenta al respecto: “A pesar de que no nos damos abasto con el mercado local,
creemos que es importante diversificar nuestras ventas y por ello estamos
explorando nuevos mercados en Latinoamérica,
donde países como Colombia y Chile son los más atractivos, no solo por su
regulación sanitaria, que es similar a la nuestra, sino porque son mercados
naturales para México.”
Sin embargo, como es de esperarse estás medidas no están
fuera de polémica, ya que como comentaba previamente, muchas empresas
consideran desleal bajar tanto el precio de un medicamento, pues los pone en
desventaja al momento en que el consumidor tiene que elegir. Muchas veces se ha
atacado la calidad de los genéricos, con el fin de sacarlos del mercado, sin
embargo no ha habido argumentos contundentes al respecto. Finalmente la
decisión es de quien va a comprar un medicamento, el usuario debe sentirse tranquilo
tanto con su costo como con la marca que adquiere.